Desde el principio me chirriaron varios elementos de esta historia, así que me ha resultado muy útil saber la opinión de otros científicos (yo también soy investigadora en el extranjero, pero en el ámbito de las Humanidades, donde las cosas funcionan de forma un poco diferente). Pienso que uno de los problemas de fondo en el tratamiento de esta historia es la mentalidad "Hago una cosa brillante y ya tengo que tener la vida solucionada", que es algo muy español. No digo que sea Diego el que piense así; en las declaraciones que ha hecho me ha parecido una persona sensata y por lo que veo el sensacionalismo ha sido azuzado más bien por sus directores de tesis y por los medios. Gente que no tiene ni idea de cómo funciona la carrera investigadora prácticamente se rasga las vestiduras porque a Diego no se lo nombre catedrático simplemente por haber ganado este premio (que seguramente hace dos días ni tenían idea de que existía). En mi experiencia en el Reino Unido, la carrera investigadora es una carrera de fondo más que un sprint, las oportunidades realmente buenas no te van a venir por haber ganado un único premio, haber escrito un único artículo por brillante que sea, haber trabajado con tal o cual persona es la capacidad de estar rindiendo de forma sostenida a este altísimo nivel lo que se valora, y es normal porque realmente hay mucha gente brillante y muy pocas plazas. Y mucho más en las RyC: si se trata de un programa para atraer y crear líderes de investigación, lo normal será que se contrate a gente que presente pruebas claras de poder alcanzar ese liderazgo, y obviamente el que tenga solo un par de pruebas puntuales perderá frente al que tenga un historial similar de varios anyos. Y esto pasa en el Reino Unido también y me imagino que en otros países, no hay duda.